Esta técnica siempre se realiza de forma segura en la clínica dental y se lleva a cabo con el médico Anestesiólogo, el Odontopediatra y el Asistente Dental. Este procedimiento se realiza en el consultorio dental. Uno de los principales objetivos para utilizar está técnica es: reducir el riesgo de daños colaterales al niño, ya que muchos presentan un comportamiento muy difícil de controlar aún usando otras técnicas de persuasión, a esto interfieren factores como el miedo o la mínima molestia que pudieran percibir. Por lo que la Sedación es la técnica que se recomienda para evitar algún tipo de descontrol que afecte a los pequeños. Con la sedación, se realiza el tratamiento necesario en su totalidad, ya que el niño esta totalmente controlado y se maniobra de una forma continua y segura. Terminado los procedimientos, el anestesiólogo despierta al niño, aunque en algunos casos se puede presentar un poco de mareo momentaneo al despertar. La mayoría de los pacientes se reincorporan de manera casi inmediata a su actividad normal. Este tipo de técnica también es muy recurrente y extremadamente recomendada a pacientes con algún problema sistemático como lo es: Síndrome de Dawn, Autismo o cualquier otro padecimiento.